lunes, 11 de mayo de 2009

La fotografía 51

La fotografía 51 es una de las fotografías más famosas en la Biología. Si se la enseñas a una persona y te dice inmediatamente lo que es, tenlo por seguro que se especializa en Genética.

La fotografía 51 es una foto del secreto de la vida, como la llamaron en ese entonces los periódicos. Es, con más precisión, una fotografía de la molécula ADN B, y es la evidencia clave que demuestra que el ADN tiene forma helicoidal.


La fotografía 51, publicada en el paper de Rosalind Franklin.

La fotografía fue hecha con una técnica llamada Cristalografía de rayos X. Hoy esa técnica es usada si mal no me equivoco en la escuela de Física de San Marcos para estudiar objetos de metal del antiguo Perú. Consiste básicamente en impactar muestras sólidas con rayos X, y luego observar y estudiar los patrones de difracción que dejan en una placa sensible (la fotografía). Los patrones proveen una imagen tridimensional de la estructura de los átomos en un sólido cristalino, pero sólo para el que sabe observar.

La fotografía 51 fue tomada por Rosalind Franklin, en 1952 (para ver el artículo original: http://www.nature.com/nature/dna50/franklingosling.pdf) . James Watson (el ganador del Premio Nobel de Medicina junto con Crick por proponer y luego deducir que esa foto era una hélice doble), en su libro La Doble Hélice, dice "en el instante en que vi la fotografía me quedé boquiabierto y mi pulso comenzó a acelerar". El año 1953 fue una de esos años milagrosos en ciencia, como dice la revista Nature. Un conjunto de 5 papers (para ver los artículos originales: http://www.nature.com/nature/dna50/archive.html), 2 de ellos con la autoría de Rosalind, establecieron que la molécula más famosa tenía la forma de una hélice doble.

Tanto Watson como Crick creyeron que Rosalind Franklin merecía también el Premio Nobel por su trabajo experimental. J. D. Bernal ha dicho que la fotografía 51 tomada por Rosalind "es una de las más bellas fotografías de rayos X de cualquier sustancia jamás tomada". Rosalind murió joven, a los 37 años, de cáncer, 4 años antes de que se entregara al Premio Nobel a Watson y Crick. Todos los honores que recibió fueron póstumos, y sólo recientemente se ha reconocido la calidad de su trabajo (hay un documental sobre la foto y sobre ella que la llama heroína:
http://www.pbs.org/wgbh/nova/photo51/).

Rosalind Franklin, preparándose café en su laboratorio de Paris.

Arte con la fotografía 51.



Pintura de la fotografía 51.

5 comentarios:

  1. Juan Carlos, en primer lugar, disculpa que mi comentario no verse sobre la entrada, sino sobre el comentario que has dejado en mi blog. Te agradezco la información que me has aportado acerca del LHC, al igual que esta entrada sobre la fotografía de la estructura helicoidal del ADN, y prometo leer tu blog con más detenimiento. Si hubieras leído el manifiesto que publiqué anterior al artículo del LHC sabrías que la ciencia no es mi campo (aunque me gusta relacionar lo que voy aprendiendo de ciencia con la filosofía de la ciencia, en la cual sí poseo cierta formación. Como decía en mi "Manifiesto de la hipotenusa homicida", voy proporcionando información en la medida que aprendo, y espero aprender mucho más con vuestros comentarios.

    No estoy de acuerdo en que utilices el adjetivo "borregos" para hacer referencia a los que no son científicos o teóricos de relevancia, aunque entiendo que te refieres a los agoreros conspiranoicos y apocalipticistas. Ya te digo que he huido de todo sensacionalismo (o eso creo).

    Yo tampoco creo que los científicos sean unos suicidas, pero creo que están inmersos en su paradigma y en el entramado de teorías que constituyen hoy la física, lo cual (y es necesario que sea así, porque si no no podrían tener una compresión profunda sobre los últimos constituyentes de la materia) es siempre una visión unilateral, comparada con la que puede tener un historiador o filósofo de la ciencia. No sé si has leído el artículo completo, pero mi crítica se apoya en una corriente de filosofía de la ciencia (basada en Kuhn, que por cierto, era físico también) que sostiene que la ciencia trabaja con paradigmas, y que adquiriendo perspectiva histórica se constata que es poco probable que hayamos encontrado un "paradigma total". También me adscribo al pensamiento de Ulrich Beck, sociólogo de reputada fama internacional, quien en su libro "La sociedad del riesgo" expone detalladamente la problemática de calcular los riesgos del progreso tecnológico en nuestra época.

    Mi argumento base es: puesto que no existe un paradigma total que constituya la verdad absoluta, todo cálculo de probabilidades respecto a los riesgos que entraña un experimento pueden ser buenas aproximaciones, pero dificilmente puede constituir un cálculo infalible.

    Yo tampoco creo que vaya a suceder catástrofe alguna en el LHC, y esa es la impresión que espero que se lleve el lector de mi artículo. Sólo creo que, llegados a este punto, perfectamente podríamos esperar a que existan mediciones (no experimentales, sino observacionales en el espacio exterior) que corroboren la radiación de Hawking.

    Por último, es cierto que no existen apenas traducciones al inglés sobre artículos científicos de calidad, tampoco sobre filosofía de la ciencia. Para aquellos que no disponemos de un nivel de inglés apto para comprender textos científicos complejos es un verdadero problema, y esa es una de las principales causas de que exista tal desinformación respecto a la divulgación científica. Acepto tu crítica en este sentido.

    Tampoco creo haber difundido este tema "desde el miedo", puesto que he reflejado los argumentos del LSAG y admitido que son tranquilizadores. También digo en mi artículo que el hecho de que la inmensa mayoría de la comunidad científica apoya el experimento me tranquiliza. Sí digo, y sigo sosteniendo, que el hecho de que la mayoría apoye un paradigma no implica, necesariamente, que estén en lo cierto.

    En cualquier caso, agradezco el tono de tu mensaje y espero que visites este blog y hagas cuantas apreciaciones críticas estimes oportunas. Yo haré lo mismo.

    Saludos.

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  2. De hecho, fue esta mujer quien realmente descubrió la forma física de la molécula de ADN y Watson y Crick basaron TODO el modelo de la doble hélice en sus apuntes, que les estaban siendo filtrados por Maurice Wilkins. No solo eso, fueron humillados por ella en su propio laboratorio cuando invitaron a la comunidad científica a revisar su primer modelo, y ella les dijo que simplemente el modelo estaba mal. Este artículo que posteas es quizás una de las mas grandes injusticias en el mundo científico, pues deduce que «confirma el modelo de Crick y Watson» cuando ellos tomaron me atrevo a decir el 80% de sus datos. No solo eso, Watson el día de hoy se refiere a ella con el despectivo de «Rosie» y la describe en su libro como no es, y dice que ella «habría concluido el modelo si fuera una experta en Rayos X» cuando ella obtuvo la mejor resolución, porque creó la mejor máquina para aquel entonces, la cual es la base para la que se utiliza hoy, casi 50 años mastarde.

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  3. tienes toda las razón

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  4. Admiro a la Dra. Rosalind Elsie Franklin :)

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